jueves, 10 de marzo de 2011

Viaje en metro

Creo que perdí la costumbre de viajar en metro, el viaje de ida no tiene mayores contratiempos, pero el de regreso ¬¬

Estuve toda la tarde haciendo unos trámites en la U, que al fin encontré la práctica y debía llenar unas formas. Me fui como pelota de Ping Pong entre las dos sedes, caminando a lo que me llevaba el demonio.

Al finalizar el papeleo y la maratón, crucé a comprarme un dulce de maicena y una bebida. Estaba tan hambrienta que pensé que podría disfrutar el regreso a casa, así que guardé las cosas en mi bolso hippie.
Como el metro está bien cerca, a unas seis o siete cuadras más o menos, me fui caminando, no es que sea tacaña, no, pero es el único ejercicio que hago en el día, así que aproveché el tiempo.
El bolso se daba tantas sacudidas que tuve que abrir la botella de agua mineral, por si sufría el típico accidente ¬¬
Cosa que me ha pasado en más de una ocasión hahaha

No alcancé a subirme, así que esperé como 10 minutos el siguiente tren. Cuando, finalmente, paró, vi que estaba lleno, así que me afirmé a la baranda como pude.
Un chico que estaba a mi lado, tuvo la genial idea de pasar el brazo para afirmarse ¬¬
Mi cuello quedó apretado ¬ Y no podía moverme.
Me entretuve pensando en cosas para vengarme, como morderlo o tirarle los pelitos rubios de su brazo, que casi me tragaba hahaha
En serio, me chuceaba el ojo el muy maldito.
Por cinco estaciones quise pegarle un mordisco, pero luego sentí tanta rabia por su mala educación que bajé mi cuello, casi decapitado, por su brazo y preferí quedarme pegada al niño que estaba frente a mí.

Es injusta la cosa, en serio. Me he quedado en medio del metro congestionado, sin poder afirmarme siquiera y un hombrecito no puede hacer lo mismo. Una vez, uno me empujó la mano y se afirmó él ¬¬

Después llegué a casa y mi madre estaba más allá, así que seguí caminando y le ofrecí mi dulce al hijo de la amiga de mi hermana, que se escondió de mí hahahaha

Prendí la tele para ver las noticias, y me siguió cabreando la actitud de la gente, mala idea encenderla.
La chica que salvó a mucho gente en el tsunami, del pasado año, en la Isla Juan Fernández ahora sufre de bullying, porque dicen que figura en televisión ¬¬
Gente malagradecida, ¿verdad?

Me duelen los pies, es raro que escriba sobre esto acá, pero tengo una flojera inmensa, así que me voy.

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