sábado, 15 de octubre de 2011

En este mes...


En el año 1917 llegaste a este mundo, a pasar dolores y alegrías y a ser la luz de mi vida, 71 años más tarde.
Naciste en este mes, no sé mucho sobre tu familia, salvo que por ti llevo algo de esta arrebatada sangre italiana y andaluza, otro motivo más para quererte.

Escribo esta entrada a tu memoria, sé que no me gusta hablar de ti, siento que soy egoísta llevándote en mi corazón de esta manera tan callada, pero así es como quiero. Detesto las demostraciones de afecto, llegan a incomodarme tanto que mi rostro adquiere unos tonos rojizos que te harían reír.

Me pregunto cómo estarás allá arriba, cobijada de estrellas y nubes aterciopeladas. Siento envidia, me falta tanto para verte otra vez, ¿seré tu orgullo en este momento o te sentirás desilusionada por el camino solitario que he tomado?

Aprendí tanto de ti, a quererme, creo que tú fuiste una razón grande para no derrumbarme.

¿Recuerdas como antes de morir pensabas en lo sola que yo estaría cuando te fueras? Desearía decirte que no lo estuve, que me rodeé de cariño, buenos amigos, pero eso sucedió muchos años después.
Tuve tantos tropiezos, tantos dolores que siguen adheridos en mi alma, incluso hoy.

Anhelé tanto tus abrazos, tu preocupación; irme sonámbula derecho a tu cama en busca de cariño, consuelo, calor de hogar, porque eso eras y eso sigues siendo para mí, ¿sabes?

Nadie puede llenar el vacio que dejaste, y me gusta que así sea, sé que nadie puede ser tan querendona y aguantarme el mal humor, y en eso, tuviste suerte, sólo tuviste una idea de la persona en la que me convertiría.


Ay, ¿qué te dirá ese viejo pelado ahora? Deberías decirle que gracias a él no he encontrado novio ¬¬ Mi complejo de Electra no quiere a un hombre que no se le parezca. Necesito esa fuerza, ese humor negro característico suyo, esas piernas fuertes de trotamundos, que recorren millas para sofocar su dolor, esa calidez en la mirada, tantas cosas, pero como no quiero que se le infle el ego, eso es todo lo que quiero que le digas.

Te dejo esta canción, sé que me he atrasado dos días de tu cumpleaños, más sigues presente, esté donde esté, tome el camino que decida.


¡Gracias a la vida por dejarme conocerte! ¡Gracias a la vida por ser mi abuela!

Ai shiteiru!!




En un sitio así te estaré soñando

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